La repetición del “gobierno unico” en la Republica Argentina. Por Meirion Griffiths

jueves, 28 de enero de 2010

La historia de la republica argentina nos tiene acostumbrados a reiterar hechos trascendentales y otros no tanto. Algunos son sociales otros son políticos, económicos culturales etcétera, en el caso político podemos encontrar raíces a problemas que responden estrictamente al fundamento ideológico de quienes gobiernan. Si analizamos algunas corrientes de pensamientos políticos contemporáneos podemos ver que muchas han quedado en el siglo XIX y de ahí vienen los problemas.

En la actualidad se pueden ver algunas repeticiones desde lo político pero más aun interesante desde lo institucional (estos dos términos van de la mano).

Volviendo atrás en la historia recordemos a "Miguel Juárez Celman" este ya daba señales de gobierno unipersonal, también hay un termino con el cual se designa al régimen implementado por Celman durante su mandato(1886-1890), el unicato, donde concentró en su persona el cargo de Presidente de la Nación y la presidencia del Partido Autonomista Nacional (P.A.N.). Su rasgo sobresaliente fue privilegiar a sus co-provincianos cordobeses con diversos favores de carácter político o más bien de amiguismo.
En 1886 el presidente Julio Argentino Roca logro que su asesor fuera Miguel Juárez Celman quien era el marido de su hermana y también un aprendiz salido de esa misma “escuela política”. Juárez Celman poco tiempo de asumir traiciono a Julio A. Roca.
Juárez Celman impuso entonces lo que la calle bautizó como Unicato. La presidencia del "Único" terminó años después con Revolución del Parque, a consecuencia de la cual ascendería a la primera magistratura del presidente Carlos Pellegrini.
Digamos que en aquel tiempo el modelo de Miguel Juárez Celman fue en constante desmedro del republicanismo digo esto porque el gobierno único o dicho por otros autores “unicato” es la reducción de los poderes en una sola persona, en la republica, tan lastimada en este tiempo, el poder es algo plural, que esta fragmentado en tres y requiere de calidad institucional. Hace unos meses en el congreso alguien se levanto y pidió que se valorara al poder judicial, era una diputada que no estaba haciendo otra cosa mas que pedir lo lógico en una republica, que se respeten los poderes. Pero llega un punto tirano en que se debe hacer lo que el pueblo quiere, y debe haber alguien que lo interprete al pueblo. En este caso es Néstor y Cristina Kirchner, este es también un drama.
Desde la asunción de la Señora presidente Cristina Fernández muchos han especulado en torno a la fuerte figura presidencial tan debilitada después del el gobierno del ex presidente Fernando De La Rúa, y de esta manera tratan de justificar el autoritarismo. Lo extraño de esto es que el gobierno que tenemos hoy en día se comporta como un gobierno de facto, con la diferencia que llego al poder por elecciones, quizás ayudada por el buen desempeño (según algunos) de su antecesor. Siguiendo con la teoría de que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner es un gobierno democrático en su origen pero no en su ejercicio, se pueden observar casos en que, al igual que la dictadura, los “contreras” pagan el precio de ser opositores. Ya lo decía Juárez Celman en su época “consultarle al pueblo siempre es un error” En junio del año pasado se le pregunto al pueblo que quería y ahí fue donde las dos cabezas del gobierno comenzaron a instrumentar otras artimañas fraudulentas para evadir lo poco de congreso que les había quedado. Ya habían gobernado mas de 3 años con mayoría en el parlamento y les había ido mas que bien, porque se les ocurría una ley y la hacían entrar en vigencia el mismo día, ni siquiera esperar día de publicación en la gaceta oficial. O cuando se cumpla la vacatio legis. Esto ya nos esta dando la pauta de que es completamente un gobierno de facto. Contextualicemos la situación política nacional en Latinoamérica. Desde el 2003 el país ase inclinado un poco a la izquierda latinoamericana, poniéndose quizás en gran amistad con personajes no superiores a Fidel Castro, Hugo Chávez, Evo Morales. Estos “presidentes” tienen una mentalidad que ya conocemos y nuestra gobernante comparte en gran parte sus ideas, tímidamente se han ido incorporando en la sociedad argentina. ¿Porque llamar a nuestro país “Republica Argentina”?si mas de la mitad de su historia ha sido gobernada por gobiernos autoritarios y muchos camuflados de democráticos. Lo que pasó en 1886 en Argentina no es una simple anécdota de autoritarismo dentro de una trayectoria republicana, tristemente.